Saltar al contenido

Día: 28 de octubre de 2012

El tonto

El tonto no es aquel que trata de hacer algo sin conocer como funciona y que es lo que obtiene al hacerlo. El tonto es aquel que cree saber lo que es necesario hacer y no es capaz de imaginar si lo que tratat de hacer es lo que los demás le están pidiendo que haga. El camino de los tontos es el que nos coduce desde la certeza hasta el fanatísmo, es decir, queremos que el mundo piense y crea lo que nosotros creemos y pensamos, y si alguien se opone lo consideramos nuestro enemigo.

¿Qué significatodo esto?

Si estamos convencidos de algo ya el convencimiento mismo coresponde a un especial verificación de lo vivido, o sea el pasado. Siel pasado es el cúmulo de vivencias, experiencias, memorias, y en general, el ámbito de lo que ya fue, ¿cómo podemos pretender que el presente se convierta en la ratificación y la autentificación de lo que ya fue? El pasado es pasado, el presente es lo que es. Lo que es no puede ser vivenciado como lo que fue, ya que al hacerlo estaríamos negando la experiencia presente.

La convición es, en este sentdo, la especial verificación del pasado en el presente. La convicción es el pasado que obstaculiza la realidad del presente. Si observamos el presente como  lo que es, entonces endríamos que concluir que el presente no puede contener ninguna convicción, ya que el obtener un aspecto que ha sido producto de nuestra elaboración mental significaría que el resente es el espacio de tiempo que se origina en el pasado y finaliza en él. ¿Es  lógico todo esto? ¿Es el presente un actuar desde el pasado o es el presente el únco y verdadero espacio en el cual existimos?

¡Es así!

Víctor