El ojo de Horus simboliza el especial y querido órgano de la vista. Lo que por tus ojos entra es la realidad circundante, el entorno, lo que te rodea. La enseñanza de tu vida es aprender a ver el mundo, las personas, situaciones, momentos y episodios con la visión del ser que, en el especial ámbito del aquí y ahora, evita reaccionar desde su pasado, su condicionamiento, sus creencias, sus memorias, traumas y expectativas.
La visión presente u observación consciente es la que permite establecer el atento ser que elige el presente como especial escenario para el íntegro desenvolvimiento de su accionar. Si lo que ves es única y exclusivamente tu presente, entonces la especial y querida puerta que conduce hasta el sentir se abre ante tus ojos y te permite establecer el especial e inigualable contacto con tu esencia divina.
La esencial elección de lo que representa el obediente aspecto que establece que tú eres el llamado a elegir el mundo que ves, es lo que te debe mover a la siguiente reflexión: Si el mundo que veo es producto de lo que mi mente almacenó, procesó y vivenció en mi especial paso por este plano, entonces debe existir un mundo, un universo más allá de mis conocimientos, creencias, y memorias. Ese es el mundo que no he conocido hasta ahora y es el mundo que deseo ver. Si ese es el mundo que nunca he visto, el que conozco no es el que se encuentra ante mi, ya que el que no veo está en el presente y el que mi mente conoce y almacena es el que ya sucedió.
Es así!
Víctor