Mensaje 11 de agosto de 2010
Querida Alma
El elemento en esta energía que denominamos creación es una elaboración a partir de un pensamiento que está en el contexto de una información que proviene de algún vínculo en otro plano. El elaborar el evasivo plan del ego no te convierte en un creador, al actuar de esa manera estamos en un encrucijada en la que nos preguntamos: el enemigo puede darnos elementos para llegar a crear en nuestra vida?
El enemigo es el mejor ejemplo de entrega insensata en estas eventualidades, su labor consiste en darte la impresión de serenidad y después entra en una gran contradicción entre tu idea de ti y lo que él dice ser de cómo tú eres.
El comienzo de este dilema es la tarea diaria del ego, su respuesta es siempre: tú no te mereces esto o lo otro, tú no eres así, tú no debes aceptar esto. Así el ego está en tu vida, él desea desea el amor de los demás hacia tu persona pero a cambio ofrece todo a excepción de amor a los que te rodean, que tremendo engaño el de esta voz!
El enemigo entra en conctacto en tu vida y te proporciona el mejor de los regalos que tú jamás hubieses imaginado, él te convierte en esclavo de sus dictámenes, eso te coloca en una posición en la que tu eres el valor 0 (cero), y el ego es el máximo valor, en esta alianza el ego te asegura que serás el gran beneficiado pero a cambio trata por todos los medios posibles de arruinar tu vida y hacerte creer además que eres culpable de todas sus fechorías y que mereces toda clase de castigos que él quiere en tu vida.
El enemigo actúa desde la razón y jamás saldrá de ahí, no puede estar en otro espacio porque en tu mente está el único lugar donde el empleo de tu avasallante entrega hace posible el conflicto y la duda, el temor y la muerte, la rabia y la tristeza, el dolor y el sufrimiento, etc, etc.
Hasta siempre
Víctor