Leo, 20 de noviembre al 5 de diciembre
Sígueme. Sé mi alumna, mi discípula. Te escogí desde el otro lado de la vida. Desde el estado de tu inacción. Quiero que de ahora en adelante tu vida sea como la línea blanca de una carretera que sólo se alumbra cuando tiene por delante los retazos de la luz del carro en donde vas pasando y delante está un incierto y abrumador trecho de penumbra. Regálame esa penumbra para que sea mi luz, porque lo único cierto de ese espacio de indeterminación es que debes seguir.
Así es la fe. Ten fe y yo te alumbraré el camino. Del resto me ocupo Yo. Cada palabra, cada gesto, cada aliento, ponlo en Mis manos porque eres mi Amor… El resto es una ilusión que tú elegiste para aprender a acompañarte.
Tú y Yo,
Jesús.
El elegido en este camino es cada corazón que recuerde mi nombre, estaré en él y él en Mí
Esta vez mira con los ojos que siempre contemplaron lo eterno, en el espacio donde no hay secretos. Entonces sabrás cómo mirar las cosas que nunca estuvieron en tu mente, que son tuyas una vez que caen las murallas del entendimiento.
Ahora dilo: que siempre son nuestras una vez que caen la murallas del entendimiento.
Una vez que entiendes que las palabras de cristal y los castillos de naipes son sólo lugares del conocimiento. Horas muertas que sirven para conocer y que por eso no tienen valo
Ahora no
Estás en otra dimensión en donde no hay destino.; sino lo que siempre nos acontece desde los paraísos remotos que ni siquiera has soñado porque tu razón no los intuye.
Cuando la energía deja de aletear como un pájaro enfermo viene otra frecuencia más leve, más sutil, tenue como el agitar de las alas del viento. ¿Quieres llegar a ella? Es entonces cuando ese paisaje se convierte en tu espejo. Una mirada y el espacio es tu ser.
Deja el mundo de renuncias, de esas imágenes de sueños que son el futuro. En todo ser viviente una imagen es vertida en otra como en el sentido las palabras. Entonces, al despertar, el ser huye del tiempo.